Baglio Donna Franca – Wine Cellar
Una galería dedicada al vino
El Baglio Donna Franca se construyó a finales del siglo XIX en la campiña de Marsala. Su nombre deriva de Franca Florio, una noble que, tras casarse con el heredero de una de las familias más ricas y poderosas de la época -los Florio-, dio origen a la llamada Bella Epoque Siciliana. En aquella época, el baglio se utilizaba como base para la recolección de las uvas que darían lugar a uno de los vinos más importantes de la zona, símbolo del alma de Sicilia y de la propia familia Florio, el Marsala. Hoy, gracias a un cuidadoso trabajo de restauración y conservación, entre las estancias del baglio aún se respira ese ambiente noble y principesco, cuna de una cultura vinícola de excelencia en toda Sicilia, que perpetúan los actuales propietarios del baglio, Giacomo Ansaldi y Paola Letizia Galfano, productores de vino ecológico, que han restaurado el baglio del siglo XIX, devolviéndole su función agrícola original.
Para Donna Franca optamos por utilizar la flexibilidad del Track 48, que queda oculto dentro de la armadura del techo, al igual que los botelleros.
Para la mesa central utilizamos Spot Plus 48 con óptica estrecha para crear ambiente y precisión en la mesa, objeto de catas, presentaciones y conferencias.
Para los bastidores, utilizamos el Spot Micro 48 con ópticas más anchas para tener uniformidad y limpieza en todas las botellas.
Todo es DALI, es decir, controlado por una unidad de control para gestionar tanto los escenarios funcionales como los escénicos, optimizando el consumo y el impacto lumínico con el artefacto arquitectónico.
Una galería del gusto
La renovación del edificio, realizada respetando y conservando la estructura preexistente, se completó con la última intervención, cuyo diseño se confió a los arquitectos Fabio Costanzo y Maria Rosaria Piazza, propietarios y socios fundadores del Studio 4e architetti associati.
Arquitectura evocadora
Concebido como un lugar para la difusión de los valores, la historia y la cultura de la bodega, Wine Cellar Baglio Donna Franca no sólo pretende exponer los productos de la bodega, sino ser un pequeño centro de conocimiento de la cultura del vino a través de una experiencia profunda e inmersiva.
Los cerramientos perimetrales transparentes permiten la comunicación visual con el exterior del complejo y su patio central, transmitiendo a los visitantes una idea de sinergia continua de todas las actividades de la bodega. Así, los espacios interiores son diáfanos y luminosos, y los elementos de mobiliario de madera, sencillos, contemporáneos, diseñados a medida y por encargo, dejan espacio para el verdadero protagonista del entorno, el vino. Grandes estanterías geométricas albergan las botellas para su almacenamiento y envejecimiento en el ambiente climatizado, constituyendo al mismo tiempo los elementos centrales de la arquitectura.